CONSECUENCIA

Amarte es consuencia de mirarte,
de fumar a media noche
mientras converso con la ausencia,
de mirar de la ventana el silencio
y desnudando poco a poco tu caricia.

Amarte es consecuencia de mi nostalgia,
de pregonar en el recuerdo
ese colchon de cenizas,
escondiendo en el interior de una estrella
la demente esperanza que ya se duerme
en el epitafio de la muerte.

Comentarios

Abigail Reyes ha dicho que…
Bello escrito -como siempre-, me encanta eso de "amarte es consecuencia de mirarte".