Hoy es viernes, las
circunstancias varían depende del estado de ánimo con que se toman, Mientras
tomo un café, pienso en los estados de mi consciencia, lo que mi mente clarea,
es bueno recordarse de vez en cuando lo humano que somos, habito en vacio, camino
por las calles pensativo, transitando poemas por mi mente, elucubrando
imágenes, deseos, historias y con ganas de fumarme algún cigarrillo, bebo el
café y dirijo la mirada hacia el vacio como queriendo encontrar las respuestas
a este desierto, y los arboles se esconden bajo la brisa, mis deseos se
deshojan en el viento como se deshoja el
calendario, ya no soy el mismo, soy más viejo y más lento para algunas cosas.
Arraigo en mi mente alguna
historia o algún verso con las ganas de escribirlos y de recrearlos en un
papel, y desvencijar la paranoia, y volver a encontrarme con algunos papeles
viejos, recordar líneas y versos mal escritos, y quiero abrazar a mi hija,
sostenerla como un acto perenne en el tiempo, y darle un beso y sonrojarme las
mejías al ver sus delicados pasos, su inocente sonrisa, sus abrazos tiernos y
sinceros, con el deseo de danzar bajo la lluvia el cascanueces.
Es un viernes extraño, pero
hermoso, por ratos lleno de languidez, de pasos grises con caricias llenas de
ternuras, con las ganas de pintar un cuadro impresionista o diluirme entre
conversaciones vanguardistas, tertulias literías donde uno constantemente
conversa con su origen y se embriaga de
pasión, se enarbolarán las esperanzas y uno puede hacer reflexiones
concluyentes con algunos ensayos o artículos de la filosofía, es un enigma
hermoso, lleno de acertijos pocos
convencionales, y me regreso a ver la colilla de mi cigarro; conjugo pasado y
presente, mientras converso con mis propias ideas.
Que bonito es volverse a reencontrarte
con el universo de la palabra escrita, balbucear el aire y la pasión de algún
texto literario, o hacer elucubraciones sobre el arte en general, es una dicha
hablar de estos temas y recordarte lo humano que eres, gracias a estas
manifestaciones de la mente y el espíritu despiertan en mi las ganas de recrear
algunas percepciones impersonales de esto que a veces le llamamos vida.
Comentarios